Hitler ganó unas elecciones

En 1933, tal día como hoy, Adolf Hitler ganó unas elecciones. Parece mentira que el ejercicio de introducir una papeleta en una urna termine como terminó aquel acto democrático.

Pero ocurrió.

Hemos encontrado, entre los múltiples que hay en la red, un discurso electoral de 1932 (está subtitulado en español). En él, tras criticar que hubiera una treintena de partidos que se presentaban a las elecciones (uno o varios por cada grupo social, laboral o territorial) se presentaba como aglutinador de todas las expectativas, de todos los anhelos.

"[...] Nosotros no queremos ser los representantes de solo una ocupación, una clase, una religión o una tierra: queremos educar al pueblo alemán para que, sobre todo, pueda aprovechar y aprender que no hay vida sin justicia, sin poder, y no hay poder sin fuerza, y que toda la fuerza deberá ser originaria de nuestro propio pueblo."

¿Quién, en su sano juicio, no hubiera votado a alguien con semejante discurso?

Estamos en año electoral. Que cada uno valore en toda su amplitud las ofertas que nos hacen los partidos democráticos. No nos quedemos con lo que queremos oir, que detrás de las palabras hay voluntades escondidas.

Aprendamos de la Historia...

(Imagen: AFP/Getty)