Excusas

Este presidente que tenemos prefiere, ya lo hemos visto todos, leer el Marca a cualquier diario informativo (me gustaría que nos dijera cuál ha sido el último libro que ha leído, por curiosidad) y una rueda de prensa por plasma, un programa deportivo o una entrevista en un medio afín, a un debate con sus competidores, aunque compañeros en esto que llamamos Estado Democrático.

Pero, claro, todo se comprende cuando tendría que contar delante de otros políticos, y de millones de espectadores, que cuando ayer defendía que las víctimas de violencia de género no están solas, se topan con la soledad de una “política de estado” con menos aportación económica que hace años, mientras que, a todas vistas, la situación ha empeorado.

Imagen: publico.es

Y tendría que decir qué piensa respecto a la guerra en Siria, y desgranar cuáles son las actuaciones que estaría dispuesto a realizar en caso de que se le solicitara ayuda expresamente.

Y querríamos saber qué va a hacer para reconducir la situación de RTVE, en caída libre y encadenada a una facción del todo partidista y partidaria.

Incluso debería hacer frente a cuestiones como la situación en Catalunya, de la que es tan responsable como Artur Mas (los catalanes lo único que han hecho es votar libremente en elecciones democráticas a una opción política).

Por no hablar de la corrupción.

No tiene un problema de agenda: se trata de excusas de mal estudiante (“profe, el perro se comió mis deberes”).